Un Gol por la Vida

Inspirados por una misma pasión: el fútbol, y movidos por una gran necesidad: la de ofrecer opciones en las vidas de los niños, niñas y adolescentes de sectores de la comunidad de Petare, un grupo de hombres y mujeres, líderes comunitarios, de diferentes oficios: plomeros, electricistas, herreros, taxistas, amas de casa, decidieron volverse entrenadores, organizar equipos y promover partidos como una vía para enseñar valores, disciplina, y abrir ventanas de posibilidades para dar un giro en las vidas de todos.

Salen de sus casas vestidos de oportunidad, cargados de sueños, como el de formar parte de nuestra Vinotinto y representar a Venezuela en algún mundial. Y en el futuro ayudar a otros niños para que, como ellos, tengan la oportunidad de darle un gol a su vida.

La Fundación Pasión Petare ha sido clave en abrir canales de apoyo para brindar a los niños los recursos básicos e indispensables que les permita cumplir sus sueños. A través de la incansable búsqueda de contribuciones logran que no les falte el uniforme, los zapatos, y en especial, el alimento, a través de comedores comunitarios. Así mismo, se encargan de facilitar la capacitación de todos los entrenadores.

En Epix contamos historias de vida, de transformaciones y logros. Nos interesa contar estas historias cargadas de pasión y grandes emociones. Darle voz a estos héroes comunitarios, quienes buscan generar igualdad de oportunidades utilizando el fútbol como herramienta de captación, para fomentar la inclusión social y mejorar su calidad de vida. Epix quiere darle el espacio a estos niños que tienen tantas cosas que decir y enseñar desde sus experiencias de vida. Queremos hablar de fútbol en la voz de cada uno de ellos, de todos estos niños y adolescentes, quienes inspirados en una misma pasión encuentran la vía para confrontar el mundo del ocio, la delincuencia y las drogas.

‍Un Gol por la Vida es una colección de historias que destaca la trascendencia de saber ¿a dónde van?, ¿qué opciones tienen?, y ¿quién los acompaña?, cuando se asoman a la calle y cierran las puertas de sus casas detrás de ellos.