Kalicharan: El río está cerca de mi casa, además mi padre es pescador, así que tal vez por eso es que me interesé en la pesca. Paso cerca de cuatro horas al día en el agua, pero paso aún más tiempo en las orillas de los ríos arreglando las redes o preparando el barco o clasificando la captura, o cosas como esa.

Mis manos son la parte principal de mi trabajo. Tienen que ser muy sensibles para saber cuando hay algo en la red, porque no siempre hay un gran empujón, a veces se trata de un pequeño tirón, o incluso sólo una pequeña vibración. Después de hacer esto durante 15 años ahora puedo sentirlo fácilmente, pero no siempre se puede predecir lo que estoy arrastrando. He capturado medusas, un pulpo, cangrejos ... ¡e incluso después de tantos años, todavía arrastro botellas y pedazos de muebles!

¿Trabajas solo? Christal Oliver · St. John, Antigua y Barbud

No puedo pescar yo solo, no de esta manera. Necesito a alguien que maneje el barco y otra persona que lo estabilice, porque el río tiene vida propia, y cuando hay mucho viento algo podría salir mal. Es por eso que me pongo un símbolo de Dios en el cuello, para que nos proteja en el río. Nada nos hará daño, y regresaremos a tierra de forma segura. Además, los hombres con los que trabajo son muy buenos en lo que hacen.

Escritura:
VonDez Phipps
Fotografía:
IniRod
Lugar:
Puri, Odisha
Fecha:
24.6.2015
No items found.

Más Historias

Juegas...
Elijes...
Thank you! Your submission has been received!
Oops! Something went wrong while submitting the form.

Un semillero de amor

Livia de Orozco
Eso es lo mejor que un hijo le puede dar a una madre: ver florecer aquél caudal de valores que se le enseñó.

Poderosa en la cancha

Indeili Torres
Todos los bloques partidos de estas calles, somos nosotros. Ponemos una arquería aquí, la otra por allá bien botada y nos ponemos a jugar matándonos por el balón.

Nature Beauty

Aleksandra Djurasic

La exquisitez de un buen libro

Diana Vilera
Hay cosas que uno va integrando, o por el contrario, que va desechando. Eso va formando lo que al final tú eres, aquello con lo que te quedas.

Katyna y el duendecillo del buscón

Katyna Henríquez
Las letras también alimentaron mi curiosidad infantil. Curiosidad que aún de adulta conservo intacta y espero no perder.
© 2023 Cultura Epix
PrivacidadTérminosCookies